Son muchas las razones por lo que las
personas hacemos deporte (divertirnos, estar en forma, sentirnos bien, perder
peso, ayudar a prevenir diferentes enfermedades, por pasión, etc.) y todos
somos ganadores de una u otra manera.
Pretendemos desde esta columna que aparecerá
quincenalmente llevarles un mensaje de motivación y de aprendizaje de esta
valiosa metodología que me acompaña desde hace 20 años cuando me radiqué en los
Estados Unidos y me formé como árbitro de fútbol (allá lo llaman soccer) y
créanme me convenció pero lo que es mejor fue artífice para triunfar primero
como árbitro y luego para dar un viraje positivo en mi vida. Hoy esa
experiencia y lecciones aprendidas las comparto con gusto en esta columna.
Ahora bien, existen personas que hacen del
deporte su profesión, en el caso que nos ocupa los ciclistas, para ellos, el
éxito individual o del equipo es un pilar fundamental de su supervivencia como
profesionales y se relacionan con los términos de exigencia y excelencia de una
manera muy cercana.
También podemos encontrar deportistas de
élite, personas que están al máximo nivel y que no tienen por qué ser
profesionales, es decir, no poseen una dependencia directa a nivel económico.
Y otros deportistas
“amateurs” que simplemente y al igual que los anteriores, les apasionan los
retos, competir y ganar, superarse a sí mismos y a otros.
Argumentan que es
parte de su genética, lo llevan en su ADN. Todos ellos se enfrentan a sus
propios desafíos y a sus dificultades, utilizando diferentes estilos de
afrontamiento, y viviendo cada experiencia a su manera y desde su realidad.
Actualmente se pueden encontrar al alcance de
la mano todo tipo de servicios profesionales relacionados con el deporte y con
la mejora del rendimiento como medio facilitador para alcanzar y lograr las
deseadas metas deportivas (entrenadores personales, fisioterapeutas,
nutricionistas, psicólogos, etc.)
En este tipo de servicios encontramos el
coaching deportivo que cada día más se posiciona como una herramienta altamente
eficiente para el desarrollo personal y profesional. Y es utilizada para
trabajar tanto con personas de manera individual (deportistas y entrenadores),
como con personas a nivel colectivo como parte de un grupo o equipo.
El
coaching deportivo facilita una mejor preparación para gestionar con éxito
objetivos y potenciar el talento. Mediante esta herramienta las personas y los
equipos consiguen dar lo mejor de sí mismos, desarrollar todo su talento y
conseguir resultados excepcionales, y es que son muchos los beneficios que
puede ofrecer:
Transiciones más cortas y aceleración de las
curvas de aprendizaje.
Desarrollo de recursos, habilidades y
competencias clave para alcanzar el máximo potencial.
Gestión de las emociones, creencias / juicios
y afrontamiento productivo ante diferentes situaciones.
Aumento de motivación, mayor capacidad de
reto y ambición.
Alineación y enfoque hacia el objetivo.
Aumento de la concentración y mayor
rendimiento.
Gestión productiva de las expectativas.
Potenciación del estilo de Liderazgo.
Aumento del sentimiento de pertenencia,
disciplina y mejora de las relaciones del grupo o equipo.
Retención de los talentos clave y reducción
de costes de contratación.
Acompañamiento en la consecución de
resultados extraordinarios.
En las próximas entregas les estaré intercambiando
experiencias de casos de éxito porque definitivamente el coaching deportivo no
es para quien tiene sueños, es para quien tiene metas y quiere convertir esas
metas en éxitos deportivos…se puede
Siro Pérez
Coach Deportivo
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