Tercera etapa del Giro,
cuya única diferencia con la anterior son los paisajes compuestos por la arena en
busca del Golfo de Aqaba. Una pequeña loma en el kilómetro 128 es simulada como
premio de categoría menor, el resto: arena, algo de vientos y planicie total.
Se baja la bandera y
casi de inmediato se arma la fuga de tres corredores: Frapporti (Androni), Barbin
(Bardiani) y nuevamente como ayer, el
combativo Boivin (Israel Cycling); la mayor ventaja ronda los siete minutos,
pero la distancia es demasiado larga como para pensar que la aventura tendrá un
final feliz.
A 60 km de meta la
ventaja se reduce y por momentos, el lote juguetea al gato y al ratón,
reduciendo la diferencia y posteriormente dando un respiro para que los fugados
se ilusionen un poco.
A cinco kilómetros, se
da la lógica y el lote arropa al trio del día y se dirigen a meta, en dónde
nuevamente Viviani muestra la supremacía de los Quick Step en este tipo de
finales, aunque hoy un poco más apretado por Sam Bennett, quien paga su
esfuerzo perdiendo también el segundo puesto con Sacha Modolo, en tanto que
Mareczko confirma la condición mostrada ayer para quedar hoy en el cuarto lugar
y Danny Van Poppel aparece hoy sí en el marcador para el quinto lugar.
Ninguna variación en la
general, Dennis líder por un segundo ante el campeón reinante Tom Dumoulin;
todos al avión para cruzar el mar cuna de la civilización Occidental y arribar
a Sicilia, para continuar el próximo martes este Giro 2018.
Si quieres ver todas
las clasificaciones visita:
Por:
Carlos
“Pichuco” Lizcano
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